Es posible generar a partir de fotografías capturadas con cámaras convencionales (no métricas digitales, analógicas, réflex, compactas, semi-profesionales y/o profesionales) y fotogramétricas documentos métricos en trabajos de arqueología, arquitectura, paleontología, industria, geología, medicina, etc. Entre los productos que pueden derivarse encontramos rectificaciones 2D, ortofotografías/ortoimágenes 2D, mediciones 2D/3D de entidades puntuales, lineales, superficiales y volumétricas, nubes de puntos coloreadas, modelos 3D y modelos fotorrealísticos 3D. Si las fotografías las capturas a lo largo del tiempo, podrás realizar labores de monitorización y análisis en 4D. Tan solo tienes que seguir los 12 consejos básicos siguientes:
Mantén la distancia focal fija, sin cambiar el zoom y desactiva el autoenfoque. Intenta enfocar al objeto en cuestión, de manera que dicho enfoque te sirva para el trabajo de documentación del máximo número de fotografías. Si por causas diversas tienes que trabajar con distintos enfoques, trata de disparar de manera secuencial, sin alternar los cambios de focal.
Trabaja en formato crudo (RAW) siempre. Con el formato crudo podrás realizar revelados digitales preservando el máximo de información.
Aumenta la profundidad de campo. Si aumentas el número f (disminuyes el diámetro del diafragma), las imágenes aparecerán enfocadas desde distancias cortas hasta el infinito. Aprovecha la distancia hiperfocal.
Toma fotografías múltiples, preferiblemente estereoscópicas (en toma normal al objeto) y alguna fotografía convergente (también estereoscópica). Dos fotografías sería el mínimo para reconstruir cualquier parte de un objeto, pero mejor tomar tres de cada zona. Trata de cubrir el máximo del formato de las imágenes. Rota la cámara 90 grados y dispara también al objeto. De esta manera, siempre podrás calibrar a posteriori la cámara cuando sea necesario.
Añade fotografías de contexto del trabajo, que permitan ver el objeto patrimonial en su conjunto, desde diferentes ángulos de vista. Las panorámicas son ideales para este fin.
Incluye alguna referencia métrica, como puede ser un jalón o una cinta métrica, para fijar la escala. Si puedes realizar una fotografía nivelada, mejor, pues permite fijar la vertical. De manera ideal puedes incluir puntos de apoyo topográficos bien distribuidos en la envolvente 3D del objeto a levantar.
Mejor que trabajes con el ISO más bajo que te permita la cámara. Evita trabajar con ISO elevado. Por tanto, es recomendable que utilices trípode para que obtengas fotografías nítidas con tiempos de exposición elevados.
Acuérdate de hacer un croquis de la toma fotográfica y de fotografiarlo también cuando acabes el trabajo. De esa manera sabrás rápidamente desde dónde has realizado la captura fotográfica. Si puedes georreferenciar las imágenes fotográficas con cualquier GNSS (GPS, GLONASS…), mucho mejor.
Mejor cuanto más homogénea sea la iluminación, ya que más fácil será crear continuidad en la representación final del trabajo. Lo ideal es trabajar a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde. Aprovecha los días nublados. Como esto no es posible la mayoría de las veces, dispara con múltiples tiempos de exposición y genera tus imágenes de alto rango dinámico (HDR).
Deberás incluir una carta de color en trabajos que requieran una reproducción fiel del color. Existen diferentes tipos en el mercado en función del tamaño y de la gama cromática. Si no dispones de carta de color, añade al menos un patrón blanco.
